viernes, 29 de julio de 2011

20110729 Cena y Concierto

Alguna noche nos tenía que tocar salir a danos un paseíto, ¿no? Después de un largo día de turisteo, quedamos con nuestros compañeros favoritos en Williamsburg, el barrio cool de Brooklyn. Está lleno de autóctonos, cosa que es importante porque a mi parecer, en Manhattan brillan por su ausencia. Es un barrio jóven y lleno de vida, muchos bares, pubs y restaurantes, no apto para menores de 21. Se veía mucha gente guapa por allí.


Lo bueno es que está a unos 15 minutillos en bus de casa nada más. Bueno, eso si pasa el autobús, claro...

Cenamos el burrito más grande que he visto en mi vida. Aunque la verdad es que se llamaba "Burrito Grande", tal cual. No podemos decir que no nos avisaran...

Como todavía no he aprendido a usar del todo la cámara, esta es la mejor churrifoto que conseguimos del concierto.
Otra vez haciendo de las mías. Juguetear con el tabasco es muy peligroso, hay que tener mucho cuidado de no tocarse luego los ojos con los dedos. Una sabia lección que aprendí gracias a la experiencia...

Niños, no hagáis esto sin la ayuda de un adulto que no sea yo.

5 comentarios:

  1. Jajaja el momento tabasco fue genial! De repente la vemos que se levanta, se sienta, se levanta, se abanica el ojo y se pone a reirse... nosotros sin saber qué le pasaba XD

    ResponderEliminar
  2. Ay Cristina... Por qué no me sorprendo de que seas tu... xDDD

    ResponderEliminar
  3. tengo q reconocer q a mi me pasó algo muuuuuuuuuuuuuuy parecido con las cayenas......te acuerdas nena?

    ResponderEliminar
  4. Me acuerdo, me acuerdo! Después de picarlas te dio por restregarte el ojo. Vaya dos!

    ResponderEliminar
  5. pfff, a mi eso que cuanta Rizos tambien me pasó. Y lo que es peor, después me mordí las uñas y me picaba la lengua. Si algun dia teneis hijos, no los dejeis a mi cargo si hay picante de por medio....

    ResponderEliminar